
¿Dibujo a mano o uso la Inteligencia Artificial (IA)?
Recientemente ilustré una serie de piezas para acompañar un trabajo editorial.
El dilema actual: ¿lo dibujo a mano o uso la inteligencia artificial?
La primera tentación es hacerlo con la IA. ¡Es super rápido! dirán algunos, sobre todo quienes no han dibujado algo en su vida.
Con una membresía de pago mensual puedo accesar a composiciones rápidas, con buenos acabados, iluminación y selección de color increíbles. Es una buena opción si busco una composición balanceada entre los sujetos principales y un ambiente cromático muy bien seleccionado. Además, ofrece muchas opciones de estilo, fotográfico, comic, 3D, vintage; buena posición de cámara, close up, panorámica, aérea; en fin una caja de herramientas emocionante.
Todo marcha bien, hasta que llega un requerimiento específico de un cliente.
No han sido pocas las veces que he pasado lidiando por mucho tiempo con la instrucción (prompt) que le brindo a la IA. En español o inglés, con versiones de IA de baja exactitud y con alta precisión. Han sido varias las ocasiones en que termino corrigiendo seis dedos, ojos sin vida, problemas de escala, etc. Son labores de tiempos ocultos que desequilibran el presupuesto.
A principios de año, con un cliente nos emocionamos con la herramienta en un documento oficial. La IA nos permitía prescindir de los fotógrafos. Llenamos tanto el documento de imágenes en IA que el resultado parecía falso, como un mockup (maqueta genérica). Terminamos eliminado casi todas las fotos y buscando fotografías reales. El cliente temía que el público concluyera que si las fotos eran falsas, ¿por qué no lo serían los datos del reporte también?
Enumero aquí algunos puntos a reflexionar sobre el diseño gráfico, la ilustración y la inteligencia artificial.
Inexactitud de las imágenes
Aunque por el momento genera problemas con lo solicitado, estoy seguro que muy pronto esto será solucionado. Mi suscripción de IA de gráficos ha renovado y mejorado su servicio cuatro veces en este año. La exactitud está relacionada al sistema de puntos que se agotan con tu mensualidad, se soluciona pagando más.
Propiedad intelectual
¿A quién le corresponden los derechos de las imágenes generadas? Ya existen algunos casos de jurisprudencia al respecto.
En 2023 en Estados Unidos, en el caso Zarya of the Dawn (1), la oficina de Derechos de Autor (USCO por sus siglas en inglés) revocó parcialmente la inscripción de la obra debido a que fue creada con MidJourney, en la cual el ser humano no tiene control creativo sobre la generación de las imágenes. Y lo hemos constatado.
En el ámbito de las patentes, en 2020 en el Reino Unido, en una solicitud de patente se intentaba inscribir a la IA DABUS (2) como inventora y dueña de la misma, pero fue revocada la solicitud bajo el argumento que la invención registrada debe tener una mente humana detrás de ella para declarar propiedad. En Australia ocurrió un caso similar en 2021.
La jurisprudencia está en desarrollo y existen algunas dudas todavía. Mientras tanto, no puedo inscribir en el registro de derecho de autor local un trabajo editorial ilustrado con IA si luego la oficina lo va a rechazar; sean estos mis trabajos o los realizados para un cliente.
Valor del producto
El valor que asignamos a los productos creados es una suma del valor objetivo y contable con el valor agregado e intangible. Simplificando el tema lo asignamos según qué tan fácil o difícil es obtener el producto en el momento adecuado y en la cantidad y calidad esperado.
Muchas de las imágenes gráficas que ofrece la IA hubiesen tenido un valor altísimo en los años 80´s, cuando el manejo del aerógrafo y las tintas chinas en color eran los paradigmas. Pero hoy en día, cualquiera puede obtener imágenes similares a un costo relativamente bajo.
Por lo tanto, el valor de la imagen cae por el suelo. Si cualquiera puede dar una instrucción a la IA y obtener un buen resultado visual, de hecho, puede obtener 50 versiones en dos minutos; entonces ¿Cuántos dólares vale esa imagen?
En una ocasión la IA nos proporcionó una imagen pero con varios defectos: pulgares en posiciones extrañas, seis dedos en una persona, etc. Me toma más de una hora editarla y mejorarla según las necesidades específicas del cliente. Tenía que cobrar el tiempo (con una tarifa que debe ser mayor a lo que cobra un plomero o un jardinero, ¿verdad?). El cliente mostró su queja “porque era una imagen de IA”, “se supone que hay que usarla para ahorrar, ¿o no?”, me expresó. El trabajo no se hizo, por supuesto.
No dudo que en otros ámbitos, se pueda monetizar, pero está quedando claro que el valor de las imágenes tiende a la baja. ¿Se traduce esta baja a todas las imágenes? ¿Inclusive las no hechas por la IA?

Originalidad
Es la cualidad que tiene algo respecto a su origen. La obra creada por el artista. No dudamos que las imágenes obtenidas sean hasta cierto punto únicas, incluso inéditas. Su origen es una compleja interacción hombre-máquina. La IA se vende como una caja de herramientas, solo que ahora no necesitamos el músculo, la coordinación, la motricidad fina o la habilidad.
Si bien, la IA produce imágenes, su origen es producto de una compleja interacción en una gran base de datos de formas, colores, claroscuro. No estoy seguro aun si llamarla producto humano.
Tomaba un café con mi esposa y conversando sobre el tema le dije que pondría a mis ilustraciones: “hecha por un humano”; “Made for humans”, me sugirió. Luego me di cuenta en la red que muchos artistas, ilustradores y fotógrafos están firmando de esa manera. “#MadeForHumans”
Sin embargo, debe existir un mayor inconveniente sobre el uso de IA en imágenes más allá del desplazamiento laboral. Así que decidí investigar más.
Desventajas cognitivas de la IA
Esta es una desventaja importante a señalar.
Ilustrar a mano, física o con una tablet digital, tiene grandes ventajas cognitivas. Dibujar y pintar mejora la memoria, estimula varias áreas del cerebro (3), especialmente las relacionadas con la atención, enfoque y concentración. Al esforzarse en áreas pequeñas y detalles, los artistas mejoran la capacidad de mantener la atención en labores complejas.
Una de las grandes ventajas de dibujar y pintar a mano consiste en estimular el pensamiento divergente, en generar muchas soluciones a un problema. Cuántas veces al estar pintando se me ocurrió la solución a un problema.
Pintar estimula la capacidad de planificación, visualización mental de problemas, complementa el pensamiento matemático y resoluciones tridimensionales. Por eso los grandes científicos e ingenieros se han ejercitado en las artes por siglos.
Podemos hablar de otros efectos terapéuticos y psicológicos, reducción de cortisol, (menos estrés); sin embargo, es importante destacar los efectos en la creación de nuevas conexiones neuronales que fortalecen la neuroplasticidad y la capacidad de adaptarse a nuevas experiencias y aprendizajes.
Pero, ¡espera! ¿Acaso no son estas las cualidades y habilidades que nos dicen que debemos fortalecer para afrontar estos tiempos?
Todas ellas se generan como producto de la práctica de una disciplina artística. Estamos en una encrucijada. Si delego a la IA toda la creación de imágenes, embelesado por el nuevo juguete que me permite la tecnología, perderé todas esas ventajas cognitivas que son las que precisamente me permiten ser disruptivo, por usar un término de moda.
¿Acaso la IA nos quiere brutos en el futuro ?

No quiero perder la oportunidad de brindarle a mi cerebro el músculo y la capacidad de explorar nuevas alternativas a los problemas, fortalecer mi memoria y concentración en la resolución de problemas. Por lo tanto, aunque me tome varias horas hacer una ilustración, las pintaré a mano.
Retomaré de la IA los consejos sobre composición de los elementos, aceptaré su paleta de colores e iluminación (y eso aun es discutible). Pero el trabajo a mano lo hago yo, la impronta (el estilo) lo plasmaré con mi experiencia, imperfectamente estética. La IA será como el auxiliar del maestro. Debo mantenerla a raya.
Nunca olvidaré cuando en The Getty Museum en Los Angeles vi por primera vez los libros ilustrados por los monjes de la Edad Media. Mi sorpresa al ver esos trazos a lápiz delimitando la retícula, incluso debajo de los colores, con esa imperfección en el pintado. “Esto lo hizo un ser humano”, le dije a mi esposa.
Cuando me acerqué al fresco del juicio final de Miguel Ángel en la capilla sixtina, le dije también a ella: “He visto sus pinceladas imperfectas, ¡Miguel Ángel era humano!
- Caso DABUS: ¿Puede la IA ser “inventor”?, Blanca Escribano y Claudia Sevilla, EY España – Digital Law. https://www.ey.com/es_es/ai/caso-dabus-puede-la-ia-ser-inventor
- La propiedad intelectual de las obras generadas por IA: el caso ‘Zarya of the Dawn’ Carolina Pina, socia del Departamento de Propiedad Industrial e Intelectual de Garrigues. https://www.garrigues.com/es_ES/garrigues-digital/propiedad-intelectual-obras-generadas-ia-caso-zarya-dawn
- Bolwerk, A., Mack-Andrick, J., Lang, F.R., Dörfler, A., & Maihöfner, C. (2014). How Art Changes Your Brain: Differential Effects of Visual Art Production and Cognitive Art Evaluation on Functional Brain Connectivity.
- Chamberlain, R., et al (2015) Drawing on the Right Side of the Brain: A Voxel-Based Morphometry Analysis of Observational Drawing. NeuroImage. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/24691200/
- Schlegel; A. Et al. (2015) The artist emerges: visual art learning alters neural structure and function. NeuroImage. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/25463452/